La iglesia parroquial de Iznajar dedicada a Santiago Apóstol está situada en la parte más alta del pueblo, dentro del recinto de la villa medieval. Se comenzó con el propósito de hacer una iglesia de grandes proporciones, pero no se llegó a terminar.  Fue desarrollada en  la época renacentista entre 1547 y 1638 y su autoría se atribuye a Hernan Ruiz el Jóven. Una ámplia restauración, tanto exterior como interiormente, fue llevada a cabo durante los años 2005 a 2008 en la que  podemos resaltar la intervención interna; las paredes del templo estaban pintadas con cal, con lo que se recupera  su estado original, en piedra. Tras esta cal, aparecieron frescos originales del S. XVII que pueden ser apreciados en los laterales próximos al altar.

La iglesia tuvo problemas de asiento desde un principio. A principios del XVIII,  se levantó un gran botarel con arbotante sobre la calle para contener la esquina del crucero opuesta a la torre. Bajo el muro del crucero del lado de la Epístola hay un gran aljibe bajo una estructura de arcos. Durante algún tiempo se sacaba el agua por la misma iglesia, hasta que en 1595 se adaptó para ser usado solamente desde la calle.

El templo está concebido como de una sola nave, con ábside semicircular y un espacioso crucero cuya nave transversal es muy corta, pero de bastante más anchura que la nave principal, la cual quedó inacabada. El presbiterio es bastante alto, fuera de lo corriente ya que mide 1,40 m. de altura. La prolongación de la iglesia se hizo a base de muros de mampostería con hiladas de ladrillo dormido, de triple hoja, y con muros de bastante menos altura que el resto y todo en general de aspecto muy pobre. El ábside está cubierto con una semicúpula de casetones  siguiendo un tipo muy repetido en la escuela Siloe.

El Retablo Mayor, de estilo barroco presenta una  buena talla y fue construido entre 1749 y 1760 por Cecilio Antonio Franco Roldán, retablo que doró en 1789 el artista lucentino Juan Ramírez de Zúñiga.

Exteriormente la iglesia presenta un noble aspecto con su arquitectura de sillares de piedra bien labrados. La torre es sencillamente un gran prisma de piedra, al que, a lo largo del tiempo, le han abierto varios huecos que han debilitado su estructura. Quedó también sin terminar y se le añadió un cuerpo de campanas de ladrillo sin decoración alguna. El interior de este campanario, tiene una compartimentación en altura bastante interesante. Debido a la inclinación del terreno junto al templo, el arranque de la torre se produce más abajo del desnivel de la iglesia, donde hay una especie de sótano abovedado. Sobre él, la sacristía, y más arriba otro espacio con bóveda de gajos. La subida a esta torre es una escalera de caracol que forma un cuerpo cilíndrico adosado a la torre.